En un principio pensabamos llegar a casa pero el cansancio y los mas de setecientos kilómetros que nos distanciaban de Errenteria nos hicieron imposible lograr nuestro objetivo. Continuábamos atravesando Francia de Este a Oeste y si bien la visita realizada a Le Puy nos había animado, llevávamos diez días en moto y eso se notaba. Apenas descansamos durante el día. El GPS nos había jugado una mala pasada en todo el viaje así que tirando de GPS de papel, como dice una amiga mía, sobre las ocho de la tarde y después de haber recorrido 534 km llegábamos a Tarbes. La ciudad se encontraba desierta y hasta que no llegamos al centro de la misma no percibimos ambiente alguno. Nos alojamos en el Hôtel La Croix Blanche (73€), en el mismo centro de Tarbes. Nos encontrábamos a unos doscientos kilómetros de casa pero había que descansar, así que después de cenar en aquella plaza centrica y sobre las once de la noche nos retiramos a descansar.
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